Viernes, 14 de Diciembre de 2018

Que otros se jacten de las páginas que han escrito; a mí me enorgullecen las que he leído. J.L. Borges.

¿Queréis conocer a un hombre? Revestidle de un gran poder. Pitaco.

Quien algo quiere algo ha de comprometer. Refrán.

Quien no comprende una mirada tampoco comprenderá una larga explicación. Proverbio árabe.

Quien no es capaz de perdonar, destruye el puente que le permitiría pasar por él mismo. Perdonar es olvidar. El hombre perdona y siempre olvida; en cambio la mujer solamente perdona. Ghandi.

Quien procede injustamente es más desgraciado que la víctima de su injusticia. Demócrito.

Quien tiene dinero tiene en su bolsillo a quienes no lo tienen. Leon Tolstoi.

Quien toma bienes de los pobres es un asesino de la caridad. Quien a ellos ayuda, es un virtuoso de la justicia. Agustín de Hipona.

¿Quieres cultivar tu alma? Vive pobre o como si lo fueses. Séneca.

¿Quieres ser rico? Pues no te afanes por aumentar tus bienes, sino en disminuir tu codicia. Epicuro.

Quizá la más grande lección de la historia es que nadie aprendió las lecciones de la historia. A. Huxley.

Recogéis a un perro que anda muerto de hambre, lo engordáis y no os morderá. Esa es la diferencia más notable entre un perro y un hombre. Mark Twain.

Recordemos que el sentido común es una especie de portero del espíritu, encargado de no dejar entrar o salir las ideas sospechosas. Daniel Stern.

Reflexiona con lentitud, pero ejecuta rápidamente tus decisiones. Isocrates.

Renunciar a nuestra libertad es renunciar a nuestra calidad de hombres, y con esto a todos los deberes de la humanidad. Jean J. Rousseau.

Retírate dentro de ti mismo, sobre todo cuando necesites compañía. Epicuro.

Rico es el que vive con lo que tiene; no debe nada… y está contento. S. Howe.

Ríe y el mundo reirá contigo; llora y llorarás sólo. Eli Wilcox.

Se aprecia mucho mejor el fondo de los valles cuando se está en la cumbre de las montañas. Napoleón.

Se aprende más en los juegos que se pierden que en las partidas que se ganan. José Raúl Capablanca.

Se conocen infinitas clases de necios; la más deplorable es la de los parlanchines empeñados en demostrar que tienen talento. Santiago Ramón y Cajal.

Se dice que las mujeres son vanidosas por naturaleza; es cierto, pero les queda bien y por eso mismo nos agradan más. Wolfgang Goethe.

Sé exigente para los demás, pero sé más exigente para contigo mismo. Oliver Cromwell.

Sé intrépido y fuerzas poderosas vendrán en tu ayuda. Anónimo.

Se olvida más fácil la muerte de seres queridos que la perdida del patrimonio. Anónimo.

Se puede tomar como compañera a la fantasía, pero se debe tener como guía a la realidad. S. Johnson.

ACCIÓN:

He comenzado todo y no he alcanzado nada. Giovanni Papini.

Feliz aquel que nunca fue lacerado por el hambre de lo imposible.  Giovanni Papini.

Siento haber sino tan sincera con vosotros, pero malgasté una gran parte de mi vida estando en silencio. Por miedo, supongo. Es inconsciente. Mantienes la cabeza abajo y avanzas… y avanzas. Y un día levantas la cabeza y te preguntas ¿cómo he llegado hasta aquí, verdad? Algunas de las cosas que tanto nos importan no tienen valor alguno. Película Las últimas vacaciones.

El sacrificio es el precio de un buen efecto. Película El truco final. El prestigio.

Nada es imposible. Lo que se desea tan solo es caro.  Película El truco final. El prestigio.

Siempre llevo todo cuanto necesito: aire en mis pulmones y unas hojas de papel en blanco. Me encanta despertarme por la mañana sin saber qué va a ocurrir, a quién conoceré o a dónde me llevará la vida. Película Titanic.

Los necios siempre se precipitan. Película La hija de Ryan.

Las voluntades débiles se traducen en discursos; las fuertes, en actos. Gustave Le Bon.

La historia es la novela de los hechos y la novela es la historia de los sentimientos. C.-A. Helvétius.

Lo hemos hecho lo mejor posible. Puede que hacer lo mejor posible no sea suficiente. Película El hombre de acero.

No publiques con facilidad lo que piensas, ni ejecutes cosa no bien premeditada primero. William Shakespeare.

No permitas que lo que no puedes hacer interfiera en lo que sí puedes hacer. J. Wooden.

No olvides que tu misión en el mundo, por insignificante que te parezca, es, sin embargo, insustituible. Juan El Presbítero.

No lleves nunca trajes hechos a la medida de otro hombre. Pitágoras.

La felicidad consiste en poder unir el principio con el fin. Pitágoras.

No puede haber felicidad si las cosas en que creemos son distintas de las cosas que hacemos. F. Stark.

¿Dices que nada se crea?, no te importe, con el barro de la tierra haz una copa para que beba tu hermano. Antonio Machado.

Despacito y buena letra, que hacer las cosas bien, importa más que hacerlas. A. Machado.

Desdichado el que duerme en la mañana. Hesiodo.

Debemos conformar nuestras acciones a los intereses de nuestros semejantes, o a los de la felicidad pública, de la cual resulta nuestra felicidad particular. Juan García del Río.

Dad al hombre salud y metas a alcanzar y no se detendrá a pensar sobre si es o no feliz. B. Shaw.

Cuántas veces en tu vida vives desde las opciones que encuentras, sin saber que puedes elegir entre las posibilidades que puedes crear. Anónimo.

Cuando tenemos muy poco que hacer, no tenemos tiempo para hacerlo. Lord Chesterfield.

Cuando la situación es adversa y la esperanza poca, las determinaciones drásticas son las más seguras. Tito Livio.

A veces, ante la mala manera de ser de los otros, uno se siente orgulloso de ser uno mismo y no otro. Andre Maurois.

Las palabras, cera; las obras, acero. Proverbio.

Llena el espacio de tu vida con acciones sólidas y no con ligerezas. Ovidio.

En este negocio de ser actor, uno sabe lo que hace: está actuando. Observe a los médicos y abogados: ellos creen que son personas reales. Walter Matthau.

¿Qué sería de la vida si no tuviéramos el valor de intentar algo? Van Gogh.

Es menester que los jóvenes amen la gloria. Es un bello motivo de obrar el deseo de poseerla. B. Sanin Cano.

Es más fácil saber cómo se hace una cosa que hacerla. Proverbio Chino.

Es cuando nos olvidamos de nosotros, cuando hacemos cosas que merecen ser recordadas. Anónimo.

En lo profundo del alma nuestra, poco a poco se ha ido gestando la noción de que hacer bien las cosas o respetar las normas equivale a una muestra de debilidad. S. Grillo.

Debemos actuar. Asumir las responsabilidades que nos corresponden. Pieter Van Der Meer.

El mundo exige resultados. No les cuentes a otros tus dolores del parto. Muéstrales al niño. Indira Gandhi.

Facilitar una buena acción es lo mismo que hacerla. Mahoma.

Fuertes razones, hacen fuertes acciones. W. Shakespeare.

Hagamos que los acontecimientos contra los cuales nada podemos, no puedan nada contra nosotros. Pawels y Bergier.

La obra humana más bella es la de ser útil al prójimo. Sófocles. 

PLACER-FELICIDAD:

¿Por qué buscáis la felicidad, oh, mortales, fuera de vosotros mismos? Severino Boecio.

La felicidad consiste en la ignorancia de la verdad. Giacomo Leopardi.

Una locura que me exalta vale por una verdad que me abate. Christoph M.Wieland.

Los placeres son mortales, pero las virtudes inmortales. Periandro de Corinto.

Buscamos la felicidad, pero sin saber dónde, como los borrachos buscan su casa, sabiendo que tienen una. Voltaire.

El que no lleva su cruz no merece la corona. J. Quarles.

Quien mira demasiado las cosas ajenas no disfruta las propias. Emerson.

Si todos los hombres tienden hacia el placer, es que todos desean vivir. Aristóteles.

Trastorno general de la época, la historia de la humanidad seria la constante sustitución del principio del placer por el principio de la realidad. Herbert Marcuse.

Gozar: qué triste fin y qué estúpida ambición. También el animal goza. Pensar: he aquí el verdadero triunfo del alma. Víctor Hugo.

Los hombres, al no haber podido evitar la muerte, la miseria, la ignorancia, han decidido, para ser más felices, no pensar en todo ello. Blaise Pascal.

Las diversiones constituyen la felicidad de quienes no saben pensar. Alexander Pope.

Para la felicidad son menos nefastos los males que el aburrimiento. Giacomo Leopardi.

Cada uno es tan infeliz como cree. Giacomo Leopardi.

Aquel que duda y no investiga se torna no sólo infeliz, sino también injusto. Blaise Pascal.

Yo soy feliz, dijo. Naturalmente se trataba de un necio. Proverbio árabe.

La felicidad es tanto mayor cuanto menos la advertimos. Alberto Moravia.

Algunos persiguen la felicidad; otros la crean. Anónimo.

La felicidad para mi consiste en gozar de buena salud, en dormir sin miedo y despertarme sin angustia. François Sagan.

En el rechazo de la ambición se encuentra uno de los principios esenciales de la felicidad sobre la tierra. Voltaire.

El deseo y la felicidad no pueden vivir juntos. Epicteto.

Las personas felices no tienen historia. Simone de Beauvoir.

Estudiar y, en el momento oportuno, llevar a la práctica lo aprendido, ¿no es acaso motivo de alegría? El que venga un amigo desde lugares remotos ¿no es acaso motivo de regocijo? No experimentar amargura pese a ser ignorado por los hombres ¿no es acaso propio de la persona noble? Anónimo.

Todo lo que da la tierra da y todo aquello que se llama felicidad solo es un juguete de la suerte; lo que nosotros somos, eso solo nos pertenece. Johann Kaspar Lavater.

Tan tiránica resulta la exigencia de placer como la prohibición del mismo. Valerie Tasso.

Es dulce ser la única fuente, la causa tiránica e inapelable de las grandes dichas y de la desesperación más honda de otro ser.  Iván Turguénev.

El tiempo vuela a veces como un pájaro, y a veces se arrastra como un caracol. Pero la mayor felicidad del hombre sobreviene cuando no se advierte si su paso es raudo [rápido] o moroso [lento].   Iván Turguénev.

El hombre ha de admirar y valorar el júbilo de hoy, los dioses cubrirán el mañana con mantos grises y obscuros. Sófocles.

Acepta la privación como medio de rectificación moral. Filósofos cínicos [Documental sobre Grecia].

Pero no era feliz, no lo había sido nunca. ¿De dónde venía aquella inconsistencia de la vida, aquella podredumbre fulminante de todas las cosas en las que trataba de apoyarse? Gustave Flaubert.

Creo que la felicidad sólo se encuentra al lado de una buena mujer; todo está en encontrarla. Gustave Flaubert.

Ser estúpido, egoísta y estar bien de salud, he aquí las tres condiciones que se requieren para ser feliz. Pero si os falta la primera, estáis perdidos. Gustave Flaubert.

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