Miércoles, 28 de Julio de 2021

El que en su vida nunca fue necio, jamás fue sabio. H. Heine.

Hablar es el terreno de la ciencia, y escuchar es el privilegio de la sabiduría. O. W. Holmes.

La sabiduría consiste en perseguir los mejores fines con los mejores medios. F. Hutcheson.

Es más fácil ser sabio para los demás que para sí mismo. La Rochefoucauld.

La filosofía triunfa sin dificultad de los males pretéritos y de los males venideros; pero los males presentes triunfan sobre ella. La Rochefoucauld.

Solamente es un verdadero sabio el hombre que la naturaleza ha instruido con sus lecciones. Píndaro.

No abarcar lo que no se puede ceñir; no aspirar a los grandes honores, por tentadores que sean; usar los bienes sin desearlos; no desear la muerte ni temerla. G. du F. Pibrac.

Que tu sabiduría sea la sabiduría de las canas, pero que tu corazón sea el corazón de la infancia candorosa. F. Schiller.

El alma del hombre sabio es constante; lucha con igual valor contra la desgracia como frente a la prosperidad. Teognidas.

¡Oh, vanidad de vanidades! ¡Qué caprichosos son los decretos del destino, cuán débiles son los mismos sabios y qué pequeños son los que se llaman grandes! W. M. Thackeray.

El saber enseña más en un año que la experiencia en veinte. Roger Ascham.

Vivir, sufrir, morir: ha aquí tres cosas que no enseñan nuestras universidades y que, sin embargo, encierran en sí toda la ciencia que el hombre necesita. P. Auguez.

… es tan poco lo que sabe el más grande filósofo que exista, que es vergonzoso verlo orgulloso y engreído, como si fuese un pozo de ciencia. G. Baretti.

Las personas ligeras y de cortos alcances, los espíritus presuntuosos y entusiastas quieren una conclusión en todas las cosas: buscan el fin de la vida y la dimensión del infinito. G. Flaubert.

He aquí los tres fundamentos del saber: observar mucho, estudiar mucho y sufrir mucho. U. Foscolo.

El buen discípulo aprende a desarrollar lo desconocido a base de lo conocido, y se acerca al maestro. Goethe.

La buena filosofía comienza con la duda y nunca termina con la obstinación. Abate Galiani.

La mayor sabiduría que existe es conocerse a sí mismo. G. Galilei.

Sigue el pensamiento de un maestro; errando a su lado consigues un beneficio. Goethe.

La sabiduría de la vida es siempre más profunda y más vasta que la sabiduría de los hombres. M. Gorki.

Aprender representa el primer paso; vivir no es más que el segundo. V. Hugo.

La filosofía no conoce otro consuelo que el olvido. F. R. de Lamennais.

Las nociones generales son generalmente inexactas. M. Montagu.

El signo más seguro de la sabiduría es el goce constante. Michel de Montaigne.

La curiosidad de conocer las cosas ha sido dada al hombre como un castigo. Michel de Montaigne.

Donde hay mucha sabiduría hay mucho dolor; quien adquiere ciencia, adquiere a la vez trabajo y tormento. Michel de Montaigne.

El verdadero saber es, esencialmente, armonía. A .Panzini.

Es necesario conocerse a sí mismo; siempre que ello no sirviera para encontrar la verdad, serviría, por lo menos, para ordenar la propia vida, y nada hay que sea más justo. B. Pascal.

Sé esclavo del saber, si quieres ser verdaderamente libre. Séneca.

El saber, sin virtud, es pernicioso y pestilente. T. Starkey.

Quien no añade nada a sus conocimientos, los disminuye. El que no procura instruirse es indigno de vivir. Talmud.

… aprende solamente para crear… F. W. Schelling.

A un sabio le falta siempre algo: el color, o la respiración, o el movimiento peristáltico, o el jugo gástrico, o lo que se llama sentido común. J. P. F. Richter.

Con un poco de filosofía no se desprecia nada; con mucha filosofía se desprecia todo. D´Yzarn-Freissinet.

Yo no sé cómo pienso, ni cómo vivo, ni cómo siento, ni cómo existo. Voltaire.

Es extraordinario hallar un sabio que no sea escéptico… J. Tannery.

Los sabios no lloran a los vivos ni a los muertos. Bhagavad-Gita.

El que tenga pocos negocios llegará a ser sabio. Biblia.

Agotad toda locura: así se llega a la tierra de la sabiduría. L. Börne.

La sabiduría crea la felicidad, pero a su vez la mayor suma de sabiduría acarrea simultáneamente los mayores dolroes. El más feliz en este mundo es el necio, aunque por ello ningún sabio pueda envidiarlo. F. Bodenstadt.

Aforismos. Georg Ch. Lichtenberg:

Ni negar, ni creer… y a la vez hacer o pensar algo que ningún hombre haya aún hecho o pensado en el mundo.

Kant dice en algún lugar: la razón es más polémica que dogmática.

Ningún invento le ha costado menos trabajo al hombre que el del Cielo.

Cuando se pone a filosofar, suele arrojar sobre los objetos una agradable luz lunar que, en general, agrada, mas no permite ver con claridad un solo objeto.

Los pequeños experimentos que hacemos, unidos a nuestros esfuerzos particulares –por insignificantes que estos suelan ser-, contribuyen a formar el gran río que desemboca en el mar de la infinitud, aunque ese río, imponiendo su nombre, devore a todos los arroyuelos. Pues, ¿qué le quedaría al Rin si a todos los arroyuelos se les ocurriera sustraerle sus aportaciones?

¿Vamos a discutir con los sentimientos o con la razón?

El hombre que vive en tres ámbitos distintos, el pasado, el presente y el futuro, puede sentirse infeliz cuando uno de esos tres ámbitos no le sirve ya de nada.

La religión ha añadido incluso un cuarto: la eternidad.

Se habla mucho de Ilustración y se desean más luces. Pero, ¿de qué sirva tanta luz, Dios mío, si la gente no tiene ojos, o, si los tiene, los cierra intencionadamente?

Si el recuerdo de la juventud no existiera, no se advertiría la vejez. Estar achacoso consiste sólo en que uno ya no puede hacer lo que hacía antes.  Pues el viejo es, sin duda, una criatura tan igualmente perfecta en su género como el joven.

Los libros con un título muy atractivo y bien elegido raramente tienen algún valor.

El señor Kant (según me contó el señor Lehmann) solía decir a propósito del mérito de las naciones con respecto a las ciencias: ‘el alemán ha aportado las raíces y el tronco; el francés, las flores; el inglés, los frutos, y el italiano, las hojas’.

Mi cabeza tiene el mismo aspecto que mi nueva biblioteca. Al hombre hay que inculcarle muy temprano el amor al orden, si no, todo se reduce a nada.

La pregunta ¿debe filosofar uno mismo? Ha de ser contestada, en mi opinión, como otra similar: ¿debe afeitarse uno mismo? Si alguien me lo preguntara, yo diría: si se sabe hacerlo bien, es una gran cosa.

Es difícil decir de forma personal lo que es del dominio público (alude a la dificultad de recrear en forma personal los mitos y personajes ya fijados por la tradición y que son propiedad de todos).  Horacio.

Ramón Llull contra cuya ars combinatoria arremete Lichtenberg en forma aún más explícita en E-72 ‘¿Cómo? ¿Entender el asunto cuando se quiere disputar? Yo afirmo que para llevar a cabo una disputa es preciso que al menos una de las partes no entienda el asunto sobre el que se está hablando, y que cuando la llamada disputa acalorada llegue a su grado máximo de perfección, ninguna de las dos partes entienda una palabra del asunto ni sepa siquiera lo que va diciendo. Éste es todo el arte de Lulio. No es un arcano [difícil de conocer], sino una adivinanza […]’.

 

 

 

Deja una respuesta

*

Be sure to include your first and last name.

If you don't have one, no problem! Just leave this blank.