Jueves, 11 de Abril de 2024

RELACIÓN:

 

Si usted realiza una transformación básica en sí mismo, entonces influirá no sólo sobre quienes están cerca de usted, sino que afectará toda la conciencia del mundo. J. Krishnamurti.

No retengas a quien se aleja de ti, porque así no llegará quien desea acercarse. C. G. Jung.

El encanto es una cualidad de los demás que nos hace más satisfechos de nosotros mismos. Henri Frédéric Amiel.

No esperemos a ser buenos y cordiales. Apresurémonos ya desde ahora a alegrar el corazón de nuestros compañeros durante la corta travesía de la vida. Henri Frédéric Amiel.

Uno siempre instintivamente hace todo lo posible por posponer la llegada del trato final. Albert Einstein.

Sin una profunda reflexión uno sabe de la vida diaria que existe para otras personas. Albert Einstein.

Un conocimiento que empieza con una galantería, tiene que acabar forzosamente en una sincera amistad. Película Un marido ideal.

En el mundo real, cada encuentro constituye una bifurcación posible. Boris Cyrulnik.

Si consideramos a los demás como a nosotros mismos, sus acciones más reprochables nos parecerían dignas de indulgencia. André Maurois.

Unas convicciones dependen de la edad; otras de las peculiaridades físicas; la mayoría, del grado de cultura que hayamos alcanzado. Necedad es disgustarse con alguien por sus convicciones de cualquier naturaleza. Constancio Vigil.

Bromear es una de las cosas amenas de la vida, pero cuesta muchos años de aprendizaje. Lin Yutang.

El hombre sabio es aquel que busca instruirse con todos los hombres; el hombre fuerte, aquel que sabe quebrar sus deseos; el hombre rico, aquel que se contenta con su suerte y el hombre honrado, aquel que honra a los demás. Proverbio israelita.

Si un hombre es tan sabio como una serpiente, puede permitirse ser tan inofensivo como una paloma. Indios Cheyene.

Los que se acuestan con perros, se levantan con pulgas. Indios Blackfoot.

No somos fríos por falta de sentimientos, si no por abundancia de decepciones. Anónimo.

La historia nos ha enseñado que basta uno para fomentar la crisis, pero conservar la paz requiere el esfuerzo de todos. Willy Brandt.

Cuando tratamos a nuestros semejantes como se merecen, conseguimos que aún sean peores. Cuando les tratamos como desearían ser, les mejoramos. Goethe.

Amonesta a tus amigos con sinceridad y aconséjales con dulzura. Si no aprueban tus consejos, suspéndelos, no sea que ofendas y pierdas a un amigo por resultar inoportuno. Confucio.

Hablando con las personas se pasa el rato. Se conversa con los  libros. Jaime Fernández.

Toda disonancia puede eliminarse y cada cosa posee un aspecto útil y agradable. Lo que sucede es que, con frecuencia, tal aspecto permanece oculto a la inteligencia limitada. Anónimo.

Un hombre vanidoso no puede ser nunca absolutamente tosco; como le satisface agradar, se acomoda a los demás. Goethe.

En las costumbres ha de verse una gran modestia. Nunca hay que actuar ni decir palabra que produzca disgusto; hay que ser respetuoso con los mayores, modesto con los iguales y complaciente con los inferiores, cosas todas ellas que hacen amarse por toda la ciudad. Maquiavelo.

Cuando hayáis vivido más tiempo en este mundo y sobrevivido a las ardientes y agradables ilusiones de la juventud, hallaréis que vuestro amor y piedad por el pueblo se decuplican, y que vuestra admiración y apego a cualquier partido u opinión política desaparecen por completo. J. S. Shorthouse.

Creo que la mayoría de los hombres no se conocen tan bien a sí mismos como los conocen los demás. Georg Ch. Lichtenberg.

El hombre ama la compañía, aunque sólo sea la de una velita encendida. Georg Ch. Lichtenberg.

Si hubiera que tolerar a los demás lo que nos permitimos hacer nosotros mismos, la vida sería insoportable. G. Courteline.

Es cosa corriente que quienes se perdonan demasiado a sí mismos son más rigurosos con los demás. San Francisco de Sales.

En general he pensado mucho, lo sé, mucho más de lo que he leído; de ahí que desconozca muchas cosas que los demás saben y me equivoque a menudo al mezclarme con la gente, lo cual me vuelve tímido. Georg Ch Lichtenberg.

… ha conocido en el mundo poca gente cuyas debilidades no hubiera descubierto al cabo de tres semanas de trato (contando solamente las horas en que las trató), lo que podría suponer un trimestre en el calendario, y estoy convencido de que no hay fingimiento que resista un trato de tres semanas, pues el arte de la fortificación tiene, en cada caso, un arte del asedio propio para el que puede ver. Georg Ch. Lichtenberg.

No tenemos palabras para hablar de sabiduría con el necio. Ya es sabio quien entiende al sabio. Georg Ch. Lichtenberg.

El hombre es lo que piensa y no lo que dice. Dos personas que intercambien cumplidos andarían a la greña si supieran lo que una piensa de la otra. G. Ch. Lichtenberg.

El conocerse demasiado o demasiado poco, constituye un estorbo para el acercamiento de dos personas. León Tolstoi.

El prójimo es el mediador indispensable entre yo y yo mismo.  Jean Paul Sartre.

Cada encuentro de dos seres en el mundo es un desgarrarse. Italo Calvino.

Lo primero que conviene aprender en el trato con los demás es que no se debe inmiscuir uno en sus modos particulares de ser felices, siempre que esos modos no pretendan inmiscuirse con violencia en los nuestros. Henry James.

Si quieres llegar rápido, ve solo; pero si quieres llegar lejos, ve en equipo. Xesco Espar.

Ni tanto que queme al santo ni tan poco que no lo alumbre. Refrán popular.

Al entrar en sociedad deben cogerse las llaves del corazón y meterlas en el bolsillo, los que las dejan en su sitio son estúpidos. Johann W. Goethe.

Crea un lugar hermoso en tu interior y entonces comienza a expandirlo hacia el exterior. Bryant McGill.

Nunca en la vida aprendí algo de alguien que estuviese de acuerdo conmigo. Dudley Field Malone.

Una sola rosa puede ser mi jardín, y un solo amigo, mi mundo.  Leo Buscaglia.

El ir lejos en la vida depende de que se sea tierno con los jóvenes, compasivo con los ancianos, solidario con los luchadores y tolerante con los débiles y los fuertes. Porque en algún momento de tu vida habrás sido todo eso». Georges Washington Carver.

Cuando estés inspirado en tus relaciones y hayas dominado el modo de vivir en paz y gozosamente con los demás, tu vida habrá emprendido el camino que yo llamo propósito. En pocas palabras, experimentarás realidad mágica a lo largo de toda tu vida cuando tus relaciones sean armoniosas. Wayne W. Dyer.

El ajedrez no es un juego. El ajedrez es una forma bien definida de computación. Puede que no te sea posible concebir las respuestas; pero en teoría debe existir una solución, un procedimiento exacto en cada posición. Ahora bien, los juegos verdaderos no son así. La vida real no es así. La vida real consiste en farolear, en tácticas pequeñas y astutas, en preguntarse uno mismo qué será lo que el otro hombre piensa que yo entiendo hacer. Y en esto consisten los juegos en mi teoría. John von Neumann.

El mundo es un gran baile en el que todos están enmascarados. [Le monde est un grand bal où chacun est masqué]. Luc de Clapiers, Marqués de Vauvenargues.

En Julio de 1870 le escribía a su sobrina: te convencerás que no se puede hablar más que con muy poca gente. El número de los imbéciles me parece que aumenta cada día. Casi todas las gentes que conocemos son intolerables y toscas e ignorantes. Gustave Flaubert.

El pensamiento oscuro, la pena, la malicia, recíbelos en la puerta riendo e invitándolos a pasar. Se agradecido sea lo que llegue, porque cada huésped ha sido enviado como un guía del más allá.  Rumi.

Una buena vida es cuando no asumes nada, haces mucho, necesitas poco, ríes bastante y agradeces lo que tienes. Anónimo.

Que alguien te trate mal no puedes evitarlo, pero  sí puedes decidir si sufrir por ello o no. Película Un verano en el Algarve.

 MALCOLM GLADWELL (sesgos en las relaciones):

• El sesgo de veracidad: tendemos a creer lo que nos dicen.

• La ilusión de transparencia: la suposición de que su conducta trasluce lo que son por dentro.

• El acoplamiento: Ciertos actos peligrosos quedan vinculados a circunstancias externas, y para acabar con esos actos peligrosos lo mejor es abordar esas circunstancias con las que están acoplados.