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La religión es la obra maestra del arte del adiestramiento animal, pues domestica a las personas enseñándoles lo que deben pensar. A. Schopenhauer.
La fatalidad del cristianismo reside en el hecho de que su creo tenía que volverse tan enfermo, bajo y vulgar como las necesidades que estaba llamado a satisfacer. F. Nietzsche.
Es necesario siempre esperar cuando se está desesperado, y dudar cuando se espera. Gustave Flaubert.
Con virtudes de templanza, mesura y honestidad; con estas fuertes espadas duramente golpead. Arcipreste de Hita.
En la inefable seducción de la virtud que sucumbe [a la sensualidad]. Gustave Flaubert.
Nuestras virtudes reposan sobre nuestros vicios como sobre sus raíces. Goethe.
La indignación moral [cabreo] es la estrategia adecuada para revestir de dignidad al idiota [qwue se siente ofendido]. M. McLuhan.
La indignación moral permite a la envida y los sentimientos de odio desfogarse bajo la máscara de la virtud. Erich Fromm.
La ironía y la inteligencia son hermanas de la sangre. Jean Paul Richter.
El conocimiento llega, pero la sabiduría permanece. Alfred Tennyson.
Sólo se aprende a través del fracaso, y lo que se aprende es la importancia de la previsión. Irvine Welsh.
En política son los medios los que deben justificar el fin. Albert Camus.
“Ad augusta per angusta” (A resultados grandes por vías estrechas). Frase latina.
No olvida nada pero lo perdona todo… avergonzará doblemente a los demás con su memoria y con su generosidad. F. Nietzsche.
No hay acción sin motivo… las tres fuentes de todas nuestras acciones: 1) el provecho propio (interés), 2) la compasión, y 3) la crueldad. Arthur Schopenhauer.
Mirad sin pensamiento, observad sin la reacción que engendra pensamiento… y ese estado mismo de la llamada observación negativa es acción. J. Krishnamurti.
Para el espíritu, como para el cuerpo, lo que limita la acción menoscaba la alegría. Concepción Arenal.
Dios, botella y sexo, es lo que les trae aquí (al manicomio). Película No todo amor es hermoso.
El castigo es un rey dotado de energía; es un administrador hábil, un sabio dispensador de la ley. Código Manú.
El verdadero hombre pone en orden su propia conducta personal y no busca nada en los otros, por lo tanto no tiene quejas que presentar. Anónimo.
Los pensamientos son las sombras de nuestros sentimientos [los siguen]. F. Nietzsche.
El verdadero hombre quiere dos cosas: el peligro y el juego. Por eso ama a la mujer, el juguete más peligroso. Anónimo.
El delito lleva consigo mismo el castigo. L. A. Seneca.
No deberían turbarnos nuestras dificultades, sino tan sólo nuestra incapacidad de hacer que crezca de ellas algo hermoso. Nietzsche.
Jamás el esfuerzo desayuda a la fortuna. Fernando Rojas.
La grandeza y la sabiduría pueden consistir en dar un paso atrás. Mathias Klotz (refiriéndose a la concepción estética de Marcel Breuer –arquitecto y diseñador húngaro-).
Eres más listo que Lepe. Afirma la frase castellana, expresión que todavía hoy sigue utilizándose. Aunque no existe consenso, algunos eruditos creen que el personaje existió realmente y que éste no era otro que don Pedro de Lepe y Dorantes, obispo de Calahorra y la Calzada, que nació en Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) en el año 1641 y murió en Arnedillo (La Rioja) el 5 de septiembre de 1700. Este ilustre prelado es el autor del Catecismo católico, libro que gozó de una asombrosa popularidad. El obispo de Lepe, según cuenta fray Luis Álvarez, destacaba por su gran cultura y privilegiada inteligencia. De hecho, su nombre figura en el Catálogo de autoridades de la lengua, publicado por la Real Academia de la Lengua Española. Óscar Gutsens.
El mar sólo es un conjunto de olas sucesivas, igual que la vida se compone de días y horas, que fluyen una detrás de otra. Parece una división muy sencilla, pero esta operación, incorporada a la mente, ha salvado del naufragio a innumerables marineros y ha ayudado a superar en tierra muchas tragedias humanas. Recuerdo haberlo leído, tal vez, en alguna novela de Conrad. Si en medio de un gran temporal el navegante piensa que el mar encrespado forma un todo absoluto, el ánimo sobrecogido por la grandeza de la adversidad entregará muy pronto sus fuerzas al abismo; en cambio, si olvida que el mar es un monstruo insondable y concentra su pensamiento en la ola concreta que se acerca y dedica todo el esfuerzo a esquivar su zarpazo y realiza sobre él una victoria singular, llegará el momento en que el mar se calme y el barco volverá a navegar de modo placentero. Como las olas del mar, los días y las horas baten nuestro espíritu llevando en su seno un dolor o un placer determinado que siempre acaba por pasar de largo… El infinito no existe, el abismo sólo es un concepto. Las pequeñas tragedias de cada día se componen de olas que baten el costado de nuestro navío. La única sabiduría consiste en dividir la vida en días y horas para extraer de cada una de ellas una victoria concreta sobre el dolor y una culminación del placer que te regale. Una sola ola es la que te hace naufragar. De esa hay que salvarse. Manuel Vicent.
Para mí la situación se resume como sigue: Occidente ha triunfado en la ciencia, pero ya no tiene una sabiduría ni una moral que resulten plausibles. Oriente puede aportarnos su moral y sus normas para vivir, pero éstas carecen de fundamentos teóricos, excepto quizás en psicología, que no es precisamente una ciencia, en todo caso no más que la sociología. Si por sabiduría se entiende la alianza de la felicidad y de la moral, la vida según la sabiduría figura entre las más difíciles de llevar cuando se encierra en límites puramente empíricos, sin la ayuda de un trasfondo metafísico. Y, sin embargo, tiene que aceptar esos límites. La sabiduría será siempre conjetural. En vano se ha esforzado el hombre, desde Buda y Sócrates, a hacer de ella una ciencia. Vano sería asimismo intentar sacar del saber que resulte demostrable una moral y un arte de vivir. La sabiduría no reposa en ninguna certidumbre científica, y la certidumbre científica no conduce a ninguna sabiduría. Ambas existen, no obstante, por siempre inseparables, por siempre separadas, por siempre complementarias. Jean-François Revel y Matthieu Ricard.
Baltasar Gracián:
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A los veinte años un hombre es un pavo real, a los treinta un león, a los cuarenta un camello, a los cincuenta una serpiente, a los sesenta un perro, a los setenta un mono, a los ochenta nada.
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Cada uno muestra lo que es en los amigos que tiene.
ENVEJECER:
Envejecer es la obra maestra de la vida. Henri-Frédéric Amiel.
Voy a envejecer para todo, para el amor, para la mentira, pero nunca envejeceré para el asombro. Chesterton.
Convertir el ultraje de los años en una música, un rumor y un símbolo. J. L. Borges.
No te aflijas, alma mía, si el torrente de los días
convierte en ruinas tu morada mortal, pues tienes el amor
para salvarte de ese diluvio.
Hafiz.Hay una fuente de la juventud: es tu mente, tu talento, la creatividad que traes a tu vida y a la vida de las personas que amas. Cuando aprendas a aprovechar esta fuente, habrás vencido verdaderamente la edad. Sofía Loren.
Película La mujer del Obispo:
-El mundo cambia pero dos cosas permanecen: la juventud y la belleza. En realidad son la misma cosa.
-La verdad es que nos hacemos viejos.
-No todo el mundo. Los únicos que se hacen viejos son los que nacen viejos.
El hombre que ha perdido la aptitud de borrar sus odios está viejo, irreparablemente. José Ingenieros.
Un hombre que no se alimenta de sus sueños envejece pronto. W. Shakespeare.
… Lo que uno tiene es la impresión de haber dejado de hacer muchas cosas importantes en la vida. Y de no haber comprendido del todo hasta qué punto la vejez es un problema, ese debilitamiento progresivo. Lo que me perturba más es el miedo a la demencia. A nuestro alrededor el Alzhéimer hace estragos. Así que yo, para luchar contra eso, hago todos los días unos ejercicios de memoria y de atención. George Steiner.
Yo soy, por ejemplo, firme partidario de la eutanasia. Los viejos destruimos a menudo la vida de los jóvenes que tienen que cargar con nosotros. ¡Me gustaría tanto tener el derecho de decir Gracias, todo ha sido magnífico, ahora basta. Eso llegará. En Holanda y en Escandinavia ya está pasando… No tenemos ya recursos para mantener en vida a tanta gente senil o demente, va contra la felicidad de mucha gente, no es justo. George Steiner.
¿Por qué Heidegger es tan importante para mí? Porque nos enseña que somos los invitados de la vida. Y tenemos que aprender a ser buenos invitados. Y, como judío, tener siempre la maleta preparada y si hay que partir, partir. Y no quejarse. George Steiner.
Hay dos clases de personas que no tienen suficiente tiempo: los muy viejos y los muy jóvenes. Película El milagro de las campanas.
HÉCTOR ALTERIO:
-¿Qué es lo peor de envejecer?
-Perder la curiosidad y el sentido del humor. Yo los mantengo y con eso me conformo.
-Nuria Espert dice que a los actores les jubila la memoria, ¿estás de acuerdo?
-Sin duda, cuando pierdes la capacidad de memorizar un texto tienes que dejar este oficio.
Película El río y la muerte:
-¿Cómo estás
-Como un tambor, viejo pero estirado.
Más que la muerte, es de temer la vejez. Expresión latina.
No era que me sintiese envejecer, sino sencillamente que comprendía que había perdido algo precioso. Henry Miller.
La gente es todo lo vieja que quiera ser. He visto algunas muchachas con 20 años y estar totalmente envejecidas, por el contrario, conozco a una muchachita con 83 años, Teresa de Calcuta, que nos enseña a vivir todos los días. Facundo Cabral.
A medida que un hombre envejece va aumentando el tamaño de su armario de medicinas. Película El diablo dijo no (El cielo puede esperar).
A [Fulan@] se le cayó el almanaque encima. Proverbio argentino. Nota: significa que alguien ha envejecido muy notoriamente en muy poco tiempo.
Envejece conmigo. Lo mejor aún no ha llegado: el principio del fin, por el cual se hizo la vida. Robert Browning.
Cada uno tiene la edad de su corazón. Alfred D´houdetot.