Crítica

La autocrítica, es la capacidad para reconocer con imparcialidad las virtudes y los defectos propios. Entre las razones que la frenan hay dos que merecen destacar:

  • Una persona educada de forma sobreprotectora y carente de autodisciplina puede convertirse en alguien caprichoso que no ve sus puntos débiles.
  • Un niño educado con rigidez, dando primacía al esfuerzo y al respeto a la autoridad, puede tener una excesiva orientación a juzgar. Percibirá la sensibilidad como debilidad y utilizará su energía en criticar a los demás, con lo cual no le quedará capacidad crítica para sí.  También podemos encontrarnos con el extremo opuesto, una autocrítica exagerada, tras al cual se esconde el deseo inalcanzable de ser perfecto. Implica la incapacidad de ver la realidad de lo que somos, substituyéndola por una imagen de perfección irreal. Puede llevar a la pasividad al ver que nunca seremos como nos gustaría.

CÓMO DESARROLLARLA:

  • Obsérvate sin comparte con los demás. En todo caso, si te comparas hazlo con los mejores, no con los peores.
  • Reconoce tu fracaso si éste se produce. Es la mejor manera de que no vuelva a suceder.  Pero trata de comprender las razones que te han llevado a estrellarte para que no te ocurra otra vez.
  • No adoptes la actitud de víctima ni pretendas que los demás te compadezcan.  A la persona que produce lástima, no suelen confiársele responsabilidades.

La crítica interior son todos los pensamientos críticos a priori que nos dirigimos a nosotros mismos. Se trata a menudo de un discurso paterno interiorizado, consecuencia de lo que oímos cuando éramos niños.  Existen varias clases, según nos situemos antes de la acción (‘¿para qué?’, ‘no funcionará’) o después de la acción (‘no valía nada’, ‘no ha servido para nada’, ‘no es suficiente’).

La crítica interior        Impacto sobre la autoestima

‘Es inútil, ¿para qué?’. Disuade de intentarlo.
‘No funcionará’. Inquietud o perfeccionismo inútil.
‘No valía nada’. Desvalorización.
‘No ha servido para nada’. Disuade de volver a empezar.
‘No es suficiente’. Insatisfacción.
  • ¿Qué hacer respecto a la crítica interior? En primer lugar, tomar conciencia de su existencia.  Lo que supone comprender que las dificultades no provienen sólo de la tarea que se emprende, sino también de los problemas de autoestima (‘sólo me siento protegido por la perfección’).  Luego, acostúmbrese a hacer las preguntas adecuadas: ¿es realista este pensamiento? ¿Me ayuda a sentirme mejor? ¿Me hace gestionar mejor la situación? ¿Me ayudará a plantar cara la próxima vez?
  • Las cuatro preguntas que deben hacerse para luchar contra la crítica interior (ejemplo de un hombre de treinta y cinco años, insatisfecho de su comportamiento en una velada a la que había sido invitado la víspera):

‘Ayer noche no estuve a la altura’

Situación              Respuesta            Estrategia

¿Es realista este pensamiento? No lo sé, no tengo más opinión que la mía. Voy a preguntar a otras personas qué les parece.
¿Me ayuda este pensamiento a sentirme mejor? No; me entristece y me angustia. Dejo de rumiar y actúo: ‘¿qué hacer ahora?’.
¿Me ayuda este pensamiento a enfrentarme mejor con la situación actual? No; me repliego sobre mí mismo. Voy a telefonear enseguida a un amigo.
¿Me ayudará este pensamiento a enfrentarme mejor con la situación la próxima vez? No, por el contrario, aumentará mis dificultades: la próxima vez me sentiré aún más incómodo. Voy a pensar en la próxima velada: ‘¿cómo puedo hacerlo para no experimentar de nuevo ese sentimiento de insatisfacción?’.

FRASES:

  • ‘Nadie se cree culpable si es él su mismo juez’. Séneca.
  • ‘La mayoría de los hombres son malos jueces de sus propios asuntos’.  Aristóteles.
  • ‘Tu ojo no puede ver sus propias pestañas. No eres capaz de ver tu propia falta. Distingues lo que está lejos e ignoras lo que está cerca’. Wang Anshi.
  • ‘No es igual conocerse a sí mismo que juzgar de sí mismo’. Vives, Juan Luis.
  • ‘No te alabes ni te insultes. Cesa de autodefinirte’. Gurdjieff.
  • ‘Lo peor que puede pasarle a un hombre es llegar a pensar mal de sí mismo’. Goethe.
  • ‘A todo el mundo le gusta usar palabras injuriosas, pero nunca ha creído nadie que a él se le aplique con razón una sola de ellas’.  Friedrich Nietzsche.