La experiencia del escuchar creativo

Experimentar1

Aquí, lo que tratamos de hacer es no sólo escuchar correctamente, sino también ser creativos; escuchar no sólo las palabras, sino experimentar lo que se dice, como si uno lo estuviera siguiendo con la mente alerta y, no obstante, silenciosa.  Pero nosotros no sabemos cómo escuchar, cómo observar lo nuevo, y lo que oímos lo encajamos en las viejas formas.  Ponemos vino nuevo en botellas viejas, y las botellas viejas estallan.  Al poner lo nuevo en viejas terminologías, se destruye el sabor de lo nuevo.  Nosotros no abordamos las experiencias de un modo nuevo; llegamos a ellas con la carga del pasado, y eso sólo fortalece el pasado (15).

Lo que tiene importancia vital es el experimentar, no el mero escuchar las palabras (16).

Escuchar no es sólo seguir lo que estoy describiendo, sino también experimentar efectivamente lo que se describe, cosa que significa vigilar el funcionamiento de su mente a medida que yo lo describo.  Si se limita a seguir lo que se está describiendo, entonces no está dándose cuenta, no observa, no vigila su propia mente.  El seguir meramente una descripción es como leer una guía mientras el paisaje para desapercibido; pero si vigila su mente mientras escucha, entonces la descripción tendrá significado, y descubrirá por usted mismo lo que significa darse cuenta (19).

Si escucháis en la forma que he estado tratando de aclarar, entonces no hay entidad o centro que experimente [el Yo].  Simplemente escucháis con todo vuestro ser, y vuestro ser no tiene límites, no está reducido a las palabras de Krishnamurti.  Pero, al escuchar al que habla, a ese río, a los pájaros, al viento entre los árboles, o al mirar las montañas, si oís y veis desde un centro [el sujeto, el Yo], entonces estáis experimentando, y esa experiencia se suma a vuestras pasadas experiencias, y sólo sirve para condicionar más la mente.  Mientras que, al escuchar y mirar sin el centro, sin traducir verbalmente lo que se oye y ve, cesa por completo la idea de experimentar; existe sólo el hecho, y no vosotros que estáis experimentando el hecho (47).

Mientras estáis sentados aquí, experimentad realmente lo que se dice.  No esperéis para pensar sobre ello después [se requiere plena atención ahora]: el ‘después’ carece de sentido; para comprender tenéis que estar con ello ahora, en el momento presente (47).