Ciceron

Fue un jurista, político, filósofo, escritor, y orador romano.

Es considerado uno de los más grandes retóricos y estilistas de la prosa en latín de la República romana.

SELECCIÓN DE FRASES:

‘Con la costumbre casi se forma otra naturaleza’.

‘Cuando aspiras a alcanzar el puesto más alto, recuerda que es honorable la segunda, o tercera posición’.

‘Donde quiera que se esté bien, allí está la patria’.

‘El estudio y la contemplación de la naturaleza es el natural alimento de la inteligencia y del corazón’.

‘El hombre condena cuando no entiende’.

‘El hombre no tiene enemigo peor que él mismo’.

‘El que enseña el camino al que va errado, luz en su luz le enciende y a él le alumbra habiéndola comunicado’.

‘Es bueno acostumbrarse a la fatiga y a la carrera, pero no hay que forzar la marcha’.

‘Esperemos lo que deseamos, pero soportemos lo que acontezca’.

‘Estar contentos con lo que poseemos es la más segura y mejor de las riquezas‘.

‘Este es el primer precepto de la amistad; pedir a los amigos sólo lo honesto, y hacer por ellos sólo lo honesto’.

‘Hay que comer y beber con tal moderación, que nuestras fuerzas se restauren y no se recarguen’.

‘La amistad comienza donde termina o cuando concluye el interés’.

‘La confidencia corrompe la amistad; el mucho contacto la consume; el respeto la conserva’.

‘La filosofía es el cultivo de las facultades mentales. Desarraiga nuestros vicios y prepara el espíritu para recibir la semilla adecuada’.

‘La gratitud no es solo la mayor de las virtudes, sino la madre de todas las demás’.

‘La fuerza es el derecho de las bestias’.

‘La honradez es siempre digna de elogio, aún cuando no reporte utilidad, ni recompensa, ni provecho’.

‘La pérdida de nuestras fuerzas es debida más bien a los vicios de la juventud, que a los estragos de los años’.

‘La vida de los muertos está en la memoria de los vivos’.

‘La vida feliz y dichosa es el único objeto de toda filosofía’.

‘Las ciencias y las letras son el alimento de la juventud y el recreo de la vejez; ellas nos dan esplendor en la prosperidad y son un recurso y un consuelo en la desgracia’.

‘Las enemistades ocultas y silenciosas, son peores que las abiertas y declaradas’.

‘Las raíces del estudio son amargas; los frutos, dulces’.

‘Los apetitos del estómago y del paladar, lejos de disminuir a medida que los hombres envejecen, van en aumento con la edad’.

‘Los hombres se asemejan al vino: el tiempo agria a los malos y mejora a los buenos’.

‘Los deseos del joven muestran las virtudes futuras del hombre’.

‘Nada más opuesto a la justicia que la violencia’.

‘Nada prueba mejor un carácter estrecho y ruin que el amor al dinero, y nada es más noble y excelso que despreciarlo si no se tiene, y emplearlo cuando se tiene, en forma benéfica y generosa’.

‘Nadie debe obedecer a aquel que no merece mandar’.

‘Ningún hombre ha llegado a ser grande sin un toque de divina inspiración’.

‘No comprendo por qué el que es feliz busca una felicidad mayor’.

‘No hay absurdo que no haya sido apoyado por algún filósofo’.

‘No hay fortaleza tan bien defendida que no pueda conquistarse con dinero’.

‘No hay nada hecho por la mano del hombre que tarde o temprano el tiempo no destruya’.

‘No me da vergüenza confesar que soy ignorante de lo que no sé’.

‘No saber lo que ha ocurrido antes de nosotros es como seguir siendo  niños’.

‘¿Qué cosa más grande que tener a alguien con quien te atrevas a hablar como contigo mismo?’.

‘Todos los hombres pueden caer en un error; pero sólo los necios perseveran en él’.

‘Si quieres aprender, enseña’.

‘Una mala paz es siempre mejor que la mejor de las guerras’.

‘Son siempre más sinceras las cosas que decimos cuando el ánimo se siente airado que cuando está tranquilo’.

‘No se puede decir nada tan absurdo como para que no haya sido dicho por algún filósofo’.

‘Ley es la suprema razón fundada en la naturaleza que ordena qué ha de hacerse y prohibe lo contrario’.

‘El bien del pueblo es la suprema ley’.

‘La Filosofía, si se quiere definir bien, no es más que el deseo de sabiduría’.

‘La naturaleza nos ha dotado con un incansable deseo de ver la verdad en nuestras mentes’.

‘La Filosofía es la verdadera medicina del alma’.

‘El hambre es el condimento de la comida’.

‘Por la costumbre se forma casi otra naturaleza’.

‘La amistad brilla más entre los iguales’.

‘Para vivir como es debido, el breve tiempo de la vida resulta bastante largo’.

‘La historia… testigo de los tiempos, luz de la verdad, vida de la memoria, maestra de la vida, testigo de la antigüedad’.

‘La cara es el espejo del alma, y los ojos son sus intérpretes’.

‘En las discordias civiles, como los buenos valen más que los muchos, propongo pesar a los ciudadanos mejor que contarlos’.

‘La Filosofía tiene por objeto la enseñanza de la virtud, el deber y la vida recta’.

‘Pensar es como vivir dos veces’.

‘No solamente es ciega la fortuna, sino que de ordinario vuelve también ciegos a aquellos a quienes acaricia’.

‘Los hombres son como los vinos: La edad agria los malos y mejora los buenos’.

‘Todas las cosas fingidas caen como flores marchitas, porque ninguna simulación puede durar largo tiempo’.

‘La victoria es por naturaleza insolente y arrogante’.

‘Recuerdo lo que no quisiera, y no puedo olvidar lo que quisiera’.

‘No entiendo por qué el que es dichoso busca mayor felicidad’.

‘La necedad es la madre de todos los males’.

‘Nadie que confía en sí, envidia la virtud del otro’.

‘Cuando mejor es uno, tanto más difícilmente llega a sospechar de la maldad de los otros’.

‘Quien contempla a un verdadero amigo, es como si contemplara a otro ejemplar de sí mismo’.

‘La vida de los muertos perdura en la memoria de los vivos’.

‘Los deseos deben obedecer a la razón’.

‘El recuerdo del mal pasado es alegre’.

‘No basta adquirir la sabiduría, es preciso usarla’.

‘Con frecuencia bajo un traje sucio se esconde una gran sabiduría’.

‘Hay que atender no sólo a lo que cada cual dice, sino a lo que siente y al motivo porque lo siente’.

‘De todos es errar; sólo del necio perseverar en el error’.

‘La ciencia que se aparte de la justicia mas que ciencia debe llamarse astucia’.

‘De hombres es equivocarse; de locos persistir en el error’.

‘Es la fortuna, no la sabiduría, la que gobierna la vida del hombre’.

‘Hago más caso del testimonio de mi conciencia que de todos los juicios que los hombres hagan por mí’.

‘Siempre la mala paz es mejor que la mejor guerra’.

‘La aspiración democrática no es una simple fase reciente de la historia humana. es la historia humana’.

‘La justicia no espera ningún premio, se la acepta por ella misma y de igual manera son todas las virtudes’.

‘La naturaleza ha puesto en nuestras mentes un insaciable deseo de ver la verdad’.

‘La naturaleza quiere que la amistad sea auxiliadora de virtudes, mas no compañera de vicios’.

‘No basta con alcanzar la sabiduría, es necesario saber utilizarla’.

‘Una cosa es saber y otra saber enseñar’.

‘La verdad se corrompe tanto con la mentira como con el silencio’.

‘No hay hombre de nación alguna que, habiendo tomado a la naturaleza por guía, no pueda llegar a la verdad’.

‘Todas las acciones cumplidas sin ostentación y sin testigos me parecen más loables’.

‘Cuanto mayor es la dificultad, mayor es la gloria’.