Blaise-Pascal

Filósofo, físico y matemático francés. Su madre falleció cuando él contaba tres años, a raíz de lo cual su padre se trasladó a París con su familia (1630). Fue un genio precoz a quien su padre inició muy pronto en la geometría e introdujo en el círculo de Mersenne, la Academia, a la que él mismo pertenecía. Allí Pascal se familiarizó con las ideas de Girard Desargues y en 1640 redactó su Ensayo sobre las cónicas (Essai pour les coniques), que contenía lo que hoy se conoce como teorema del hexágono de Pascal.

La designación de su padre como comisario del impuesto real supuso el traslado a Ruán, donde Pascal desarrolló un nuevo interés por el diseño y la construcción de una máquina de sumar; se conservan todavía varios ejemplares del modelo que ideó, algunos de cuyos principios se utilizaron luego en las modernas calculadoras mecánicas.

En Ruán Pascal comenzó también a interesarse por la física, y en especial por la hidrostática, y emprendió sus primeras experiencias sobre el vacío; intervino en la polémica en torno a la existencia del horror vacui en la naturaleza y realizó importantes experimentos (en especial el de Puy de Dôme en 1647) en apoyo de la explicación dada por Torricelli al funcionamiento del barómetro.

La enfermedad indujo a Pascal a regresar a París en el verano de 1647; los médicos le aconsejaron distracción e inició un período mundano que terminó con su experiencia mística del 23 de noviembre de 1654, su segunda conversión (en 1645 había abrazado el jansenismo); convencido de que el camino hacia Dios estaba en el cristianismo y no en la filosofía, Blaise Pascal suspendió su trabajo científico casi por completo.

SELECCIÓN DE FRASES:

‘El orgullo contrapone todas las miserias’.

‘Nuestra incapacidad de conocer la verdad es consecuencia de nuestra corrupción, de nuestra decadencia moral’. []

‘A la verdad se llega no sólo por la razón, sino también por el corazón’.

‘Al no poder conseguir que sea forzoso obedecer a la justicia, se ha hecho que sea justo obedecer a la fuerza’.

‘Aquel que duda y no investiga, se torna no sólo infeliz, sino también injusto’.

‘Burlarse de la filosofía es ya filosofar.’

‘Conocemos la verdad no solo por la razón, sino por el corazón’.

‘Cuando no se ama demasiado no se ama lo suficiente’.

‘Cuando uno se queje de su trabajo, que lo pongan a no hacer nada’.

‘Cuanto más talento tiene el hombre, más se inclina a creer en el ajeno’.

‘¿Después de todo que es el hombre en la naturaleza?, nada en relación con la infinidad, todo en relación a la nada. Un punto central entre la nada y el todo e infinitamente lejos de entender la diferencia entre estas dos posturas’.

‘Decidor de frases ingeniosas: mal carácter’.

‘Descripción del hombre: dependencia, deseo de independencia, necesidad’.

‘Dicen que el hábito es una segunda naturaleza. Quien sabe, empero, si la naturaleza no es primero un hábito’.

‘Dos extremos: excluir la razón y no admitir más que la razón’.

‘El amor no tiene edad; siempre está naciendo’.

‘El amor tiene razones que la razón no entiende’.

‘El arte de persuadir consiste tanto en el de agradar como en el de convencer; ya que los hombres se gobiernan más por el capricho que por la razón’.

‘El corazón tiene razones que la razón desconoce’.

‘El egoísta odia la soledad’.

‘El hombre está dispuesto siempre a negar todo aquello que no comprende’.

‘El hombre es una caña, la más débil de todas, pero una caña que piensa’.

‘El hombre está visiblemente hecho para pensar. En ello radica su fin y su esencia (…). Pero ¿en qué piensan las gentes? Jamás en esto, sino en bailar, cantar, hacer versos, correr sortijas, construir seres, hacerse reyes sin saber lo que es ser rey y ser hombre’.

‘El hombre, por naturaleza, es crédulo, incrédulo, tímido y temerario’.

‘El hombre se supera a si mismo infinitamente porque siempre está en camino hacia la plenitud infinita’.

‘El hombre tiene ilusiones como el pájaro alas. Eso es lo que lo sostiene’.

‘El mundo está lleno de buenas máximas y vacío de gente que las aplique’.

‘El orgullo contrapesa todas las miserias. O bien las oculta o, si las descubre, se glorifica a sí mismo por haberlas conocido’.

‘El pasado y el presente solamente son medio para nosotros: el futuro es siempre nuestro fin. Por eso nunca vivimos realmente, sino que esperamos vivir. Alucinados siempre por esta esperanza de ser felices algún día, es inevitable que no lo seamos nunca’.

‘El placer de amar sin osar confesarlo tiene sus penas, pero también sus dulzuras’.

‘El rey está rodeado de gente que no piensan sino en divertirlo y en impedir que piense en sí mismo. Porque, por muy rey que sea, es desgraciado si piensa en ello’.

‘El tiempo amortigua las pesadumbres y las desavenencias, porque en él cambiamos y nos convertimos en cierto modo en otras personas’.

‘El universo es una esfera infinita cuyo centro está en todas partes y la circunferencia en ninguna’.

‘En las religiones es preciso ser sinceros; verdaderos paganos, verdaderos judíos, verdaderos cristianos’.

‘Entre nosotros y el cielo o el infierno no hay más que la vida, que es la cosa más frágil de todas’.

‘¿Es la prisa la pasión de los necios?’.

‘Es más fácil soportar la muerte sin pensar en ella, que soportar su pensamiento sin morir’.

‘Es más hermoso saber algo de todo que saber todo de una cosa; esta universalidad es más bella. Si se pudiera tener las dos, mucho mejor; pero es preciso elegir’.

‘Es miserable saberse miserable, pero es ser grande reconocer que se es miserable’.

‘Es mucho mejor conocer algo acerca de todo, que acerca de una sola cosa. Lo universal es siempre mejor’.

‘Es sin duda un mal, estar lleno de defectos; pero es todavía un mal mayor estar lleno de ellos y no quererlo reconocer, porque es añadir todavía el de una ilusión voluntaria’.

‘Esforzarse en pensar bien; he aquí el principio de la moral’.

‘Estando siempre dispuestos a ser felices, es inevitable no serlo alguna vez’.

‘Existen tres medios de crecer: la razón, la costumbre y la inspiración’.

‘He redactado esta carta más extensa de lo usual porque carezco de tiempo para escribirla más breve’.

‘La conciencia es el mejor libro moral que tenemos’.

‘La contradicción no es una señal de falsedad, ni la carencia de contradicción una señal de verdad’.

‘La curiosidad no es más que vanidad. En la mayoría de los casos, sólo queremos saber algo para hablar de ello’.

‘La desgracia del hombre se debe a que no quiere permanecer tranquilo en su habitación, que es su lugar’.

‘La desgracia descubre al alma luces que la prosperidad no llega a percibir’.

‘La elocuencia es la pintura del pensamiento’.

‘La falsa humildad equivale a orgullo’.

‘La fantasía es parecida y contraria al sentimiento’.

‘La Fe dice lo que no dicen los sentidos, pero no lo contrario de lo que ven. Está por encima de ellos pero no contra ellos’.

‘La felicidad es un artículo maravilloso: cuanto más se da, más le queda a uno’.

‘La felicidad total del hombre consiste en disfrutar de la estimación de los demás’.

‘La filosofía consiste en reírse de la filosofía’.

‘La grandeza de un hombre consiste en saber reconocer su propia pequeñez’.

‘La imaginación dispone de todo; crea belleza, justicia, y felicidad, que es el todo del mundo’.

‘La justicia sin la fuerza es irrisoria; la fuerza sin justicia es tiranía’.

‘La mayor parte de los errores de los médicos proviene no de malos raciocinios basados en hechos bien estudiados, sino de

raciocinios bien establecidos basados en hechos mal observados’.

‘La moral es la ciencia por excelencia; es el arte de vivir bien y de ser dichoso’.

‘La razón obra con lentitud, y con tantas miras, sobre tantos principios, que a cada momento se adormece o extravía. La pasión obra en un instante’.

‘La reina del mundo es la fuerza y no la opinión; pero es la opinión quien usa de la fuerza’.

‘La verdad de la religión estriba en su misma oscuridad, en la escasa luz que tenemos sobre ella y en nuestra indiferencia por esa luz’.

‘ La verdad es útil a quien la escucha, pero desventajosa a quien la dice, porque lo hace odioso’.

‘La virtud de un hombre no debe medirse por su esfuerzo, sino por sus obras cotidianas’.

‘Lo que se ve con frecuencia no maravilla… Lo que nunca se vio, cuando ocurre, se tiene por prodigio’.

‘Lo último que uno sabe es por donde empezar’.

‘Los extremos se tocan’.

‘Los hábitos son una segunda naturaleza que destruye a la primera’.

‘Los hombres no aman naturalmente sino aquello que puede serles útil’.

‘Los hombres son tan necesariamente locos que sería estar loco, con otro género de locura, no estar loco’.

‘Los mejores libros son aquellos que quienes los leen creen que también ellos pudieron haberlos escrito’.

‘Muy débil es la razón si no llega a comprender que hay muchas cosas que la sobrepasan’.

‘Nadie habla en nuestra presencia del mismo modo que en nuestra ausencia. La sociedad humana está fundada en este mutuo engaño’.

‘No creo en las revoluciones que cambian el orden de las cosas y no cambian el corazón del hombre’.

‘No debo buscar mi dignidad en el espacio, sino en el gobierno de mi pensamiento. No tendré más aunque posea mundos. Si fuera por el espacio, eluniverso me rodearía y se me tragaría como un átomo; pero por el pensamiento yo abrazo al mundo’.

‘No es bueno ser demasiado libre. No es bueno tener todo lo que uno quiere’.

‘No es cierto que todo sea incierto’.

‘No hay más que dos clases de hombres: unos, los justos, que se creen pecadores; otros, los pecadores, que se creen justos’.

‘No lo buscarías si no lo hubieras ya encontrado’.

‘No poseemos la verdad ni el bien nada más que en parte y mezclados con la falsedad y con el mal’.

‘Nos gusta más la caza que la presa’.

‘Nuestra imaginación nos agranda tanto el tiempo presente, que hacemos de la eternidad una nada, y de la nada una eternidad’.

‘Nuestra naturaleza está en movimiento. El reposo absoluto es la muerte’.

‘Ordinariamente, uno se convence mejor por las razones que encuentra por si mismo que por aquellas que proceden del espíritu de los demás’.

‘Para quienes no ansían sino ver, hay luz bastante; más para quienes tienen opuesta disposición, siempre hay bastante oscuridad’.

‘Para ser dichoso y serlo con toda seguridad es necesario procurar que los demás lo sean también. Tus bienes y tus males dependen en gran medida de aquellos con quienes te hayas juntado. La confidencia corrompe la amistad; el mucho contacto la consume, el respeto la conserva’.

‘Pintar el amor ciego es una sinrazón de los poetas; es preciso quitarle la venda y devolverle para siempre la alegría de sus ojos’.

‘Pocas amistades quedarían en este mundo si uno supiera lo que su amigo dice de él en ausencia suya, aún cuando sus palabras fueran sinceras y desapasionadas’.

‘Por muchas riquezas que un hombre posea y por grandes que sean la salud y las comodidades de las que disfrute, no se siente satisfecho si no cuenta con la estimación de los demás’.

‘¿Puede haber algo más ridículo que la pretensión de que un hombre tenga derecho a matarme porque habita al otro lado del agua y su príncipe tiene una querella con el mío aunque yo no la tenga con él?’.

‘Que cada uno en su ley busque en paz su luz’.

‘¿Quien se siente desgraciado por no ser rey, sino un rey destronado?’

‘Sabed que el hombre supera infinitamente al hombre’.

‘Saber más que los otros es fácil… Lo difícil es saber algo mejor que los otros’.

‘Si el artesano estuviese seguro de soñar por espacio de doce horas que es rey, creo que sería tan feliz como un rey que soñase doce horas que es artesano’.

‘Si los hombres supieran lo que unos dicen de otros no existirían en el mundo cuatro amigos de verdad’.

‘Sólo se es verdaderamente feliz cuando se sueña con la felicidad’.

‘Somos tan desdichados que no podemos encontrar placer en algo sino con la condición de enfadarnos si no tiene éxito’.

‘Todas las buenas máximas están en el mundo; sólo hace falta aplicarlas’.

‘Todo nuestro razonamiento se reduce a ceder al sentimiento’.

‘Todos los hombres consideran la felicidad como su objetivo: no hay ninguna excepción. Por diferentes que sean los medios que empleen, todos tienden al mismo fin’.

‘Vale más saber alguna cosa de todo, que saberlo todo de una sola cosa’.

‘Por lo común, nos persuaden mejor las razones que uno ha encontrado por sí mismo que las encontradas por los demás’.

‘Nos consolamos con pequeñeces porque son menudencias las que nos afligen’.